Riegosolar es el sistema de bombeo solar directo que proporciona caudal y
presión constantes.
Está dirigido al riego de cultivos agrícolas y tiene la cualidad de poder
adaptarse a las necesidades de cada usuario, ya que puede instalarse en
fincas de cualquier tamaño, dimensionando el sistema correctamente al igual
que es apto para cualquier sistema de riego, aspersores, pivot etc. puesto que
podemos conseguir la presión requerida modificando la potencia de los
componentes de la instalación.
Los sistemas de bombeo solar existentes hasta el momento consisten en la
extracción del agua con módulos fotovoltaicos y el almacenamiento en
depósitos elevados, con lo que el sistema queda limitado al riego por goteo, o
embalsando ingentes cantidades de agua para después ser bombeada con otro
motor alimentado por fuentes convencionales.
Riegosolar soluciona el problema de las variaciones de caudal que se pueden
producir en función de la radiación colocando un pequeño depósito entre la
bomba principal sumergida y la bomba secundaria que aportará presión, este
depósito solamente deberá contener entre dos y cinco minutos del caudal
máximo de la bomba principal, y contará con unas sondas para indicadoras de
nivel.
Un autómata será el encargado de recoger la información de la radiación,
temperatura y tensión de los módulos junto con la proveniente de las sondas
del depósito, para que según la programación establecida se pongan en
funcionamiento las bombas, ya sea a la vez o por separado.
El control PID interno al variador de frecuencia de la bomba principal consigue
hacer trabajar a los módulos fotovoltaicos a la tensión de punto de máxima
potencia que calculada.
Habiendo estudiado la tendencia de los precios del gasóleo B podemos afirmar
que una instalación media estaría amortizada entre 4 y 6 años, comparándola
con la utilización tanto de energía eléctrica como con la utilización de un motor
diesel para el riego.
El coste de la energía eléctrica debido a la supresión de las tarifas especiales y
al actual plan para la eliminación del déficit tarifario está experimentando
fuertes subidas, si a ello sumamos el coste de llevar una línea a una finca
aislada, nuestro sistema es a día de hoy más rentable.